Laburpena

Este trabajo parte de la necesidad de reflexionar sobre la inevitable transformación del ámbito urbano en el actual contexto de crisis ecológica. Una crisis que nos sitúa ante la necesidad de una transición hacia un escenario de reducción en el consumo de recursos y de adaptación al cambio climático, en la que las ciudades, como centros neurálgicos socioeconómicos, políticos y culturales que concentran a más de la mitad de la población, serán actores clave.

Desde una revisión de la planificación urbana, como disciplina que materializa las políticas que configuran la ciudad y el territorio, este trabajo trata de establecer directrices y estrategias clave que abren el camino hacia un enfoque ecológico y social del urbanismo. El objetivo es determinar hacia dónde deben dirigirse las herramientas de planificación para adaptar el metabolismo urbano a las limitaciones de la biosfera, al mismo tiempo que se abordan las desigualdades sociales.

La definición de urbanismo ecosocial se desarrolla en cinco ámbitos de actuación interrelacionados entre si —integración en el territorio, renaturalización, sistema alimentario, energía y movilidad— cuyas propuestas, ejemplificadas a través de buenas prácticas ubicadas en el Estado español, nos ayudan a imaginar una ciudad ecológica, social y deseable.